El proyecto se ejecutará durante los próximos 2 años y consiste en devolver la integridad estructural de la tubería a sus condiciones originales de diseño. La conducción, de 255 metros de longitud, tiene un diámetro de 2,5 metros y discurre por el interior de galería con inclinaciones hasta 55º y 35 bares de presión.
Un reto que consolida la apuesta de Endesa y Grupo Navec por la innovación tecnológica, la economía circular y el empleo de materiales compuestos en la renovación de sus Unidades de Producción Hidráulica.